Cefixime, una nueva cefalosporina oral, es más activa contra enterobacteriaceae que las cefalosporinas orales convencionales. Alrededor del 20% del fármaco es excretado por los riñones como fármaco activo. Por lo tanto, el tratamiento de la infección del tracto urinario (u) con cefixima puede ser una buena alternativa., En dos estudios «occidentales» más pequeños no controlados y cuatro más grandes controlados (amoxicilina, cotrimoxazol), así como en ocho estudios japoneses, se pudo demostrar la buena eficacia de la cefixima en infecciones urinarias sin complicaciones. Debido a su espectro antibacteriano en este tipo de infección, la terapia con cefixima puede iniciarse ya antes de la prueba de sensibilidad. En cuanto al tratamiento de la pielonefritis aguda, sólo se han notificado unos pocos casos. Se podrían lograr buenos resultados, excepto en el caso de la infección por Proteus mirabilis., En el tratamiento de infecciones urinarias complicadas, nuestros propios estudios controlados (norfloxacina) y 13 estudios japoneses no controlados mostraron que la cefixima es un antibiótico eficaz si las infecciones son causadas por cepas sensibles. Dado que en lasti complicadas también se pueden encontrar patógenos grampositivos y no fermentadores resistentes a cefixima, el tratamiento no debe iniciarse sin pruebas de sensibilidad. En cuanto al tratamiento de la U en niños, solo se reportan pocos resultados, pero prometedores. La tolerancia de cefixima fue similar a la de los fármacos comparativos., Sin embargo, la dosis una vez al día (400 mg) mostró una mayor incidencia de efectos adversos gastrointestinales que una dosis dos veces al día (200 mg). Por lo tanto, la dosis diaria debe administrarse dividida en dos tomas. En resumen, la cefixima demostró ser una buena alternativa en el tratamiento de lasti.